Misiones no desempeña un papel importante en la dinámica criminal regional, a pesar de que en el departamento existe cierto tráfico de marihuana.

Un conocido caso de tráfico de cannabis en Itatí, en la vecina Argentina, demostró que a través del departamento fluye un volumen sustancial de cannabis, y de allí se introduce de contrabando a Argentina, a través del río que demarca la frontera internacional entre los dos países.

El contrabando de cocaína parece estar en aumento, principalmente a lo largo de rutas clandestinas utilizadas para movilizar ganado.

Actores criminales

Primer Comando de la Capital (Primeiro Comando da Capital, PCC): Algunos miembros del PCC están encarcelados en la prisión de San Juan Bautista en Misiones. Es posible que la pandilla use a los guardias de la prisión para enviar órdenes a sus compañeros por fuera.

Clan Rotela: Esta organización se dedica principalmente a la venta de drogas en la capital de Paraguay, Asunción, pero algunos de sus miembros están encarcelados en la prisión de San Juan Bautista. En tanto es un peligroso grupo de alcance nacional, el Clan Rotela compite con el PCC para reclutar nuevos miembros en las prisiones del país.

Economías criminales

Tráfico de armas: El tráfico de armas no parece ser una economía criminal significativa en Misiones. Sin embargo, es posible que los grupos criminales involucrados en el contrabando de marihuana y cocaína a través del departamento utilicen armas de fuego ilegales para proteger sus cargamentos. En 2019, las autoridades incautaron solamente cinco armas de fuego en Misiones, en comparación con 14 en 2018. No está claro qué tipo de armas de fuego eran.

Cocaína: Misiones es un punto de tránsito de la cocaína boliviana que va con destino a Argentina. Las naves cargadas con drogas aterrizan en fincas rurales, donde repostan y continúan hacia Argentina. En estos lugares se suele almacenar cocaína. Hay además un pequeño mercado de consumo de crack y cocaína en el departamento. En los últimos tres años, las autoridades incautaron menos de un kilo de cocaína. No hay pruebas de que las principales organizaciones criminales estén involucradas en el tráfico de drogas de Misiones. Los principales actores son grupos independientes de Argentina y Paraguay.

Cannabis: Misiones es un punto de tránsito del contrabando de marihuana desde Itapúa y Caazapá hasta Ñeembucú y Argentina. No hay evidencia del cultivo o producción de cannabis en el departamento. Aunque algunos miembros del PCC están encarcelados en Misiones, no parecen estar involucrados en el tráfico de drogas del departamento. Más bien, las redes argentinas y paraguayas trasladan el cannabis a Argentina por vía fluvial y terrestre. Los camiones pueden llevar entre 400 y 500 kilos de marihuana. En 2019, las autoridades incautaron solamente un kilo de cannabis en Misiones, y menos de uno en 2018. Se trata de una fuerte disminución con respecto a las ocho toneladas incautadas por las autoridades en 2017. Es probable que haya un subregistro de la cantidad de cannabis que transita por el departamento.

Contrabando: El contrabando es una economía criminal menor en Misiones, pero al departamento se han introducido de contrabando productos como carne y elementos de limpieza e higiene. El contrabando de carne parece sustentarse en el robo de ganado en el departamento. Los productos de limpieza se contrabandean a Misiones desde Asunción, un centro de distribución de contrabando. Las frutas y verduras, especialmente los tomates, entran al departamento a través de su frontera con Argentina, o a través de Encarnación.

Fuentes: Este perfil se elaboró con base en una investigación de campo en San Juan Bautista, Misiones, y cuatro viajes a Asunción, donde InSight Crime entrevistó a funcionarios del Ministerio del Interior, la Procuraduría General de la Nación, la Secretaría Nacional Anticorrupción (SENAC), la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD), la Secretaría de Prevención del Lavado de Dinero o Bienes (SEPRELAD), la Unidad Especializada en la Lucha contra la Trata de Personas de Paraguay, funcionarios de prisiones, la Dirección Nacional de Aviación Civil (DINAC), la policía nacional, funcionarios judiciales, la gobernación, fiscales y políticos locales, organizaciones no gubernamentales que trabajan en temas de derechos humanos y ambientales, líderes comunitarios y periodistas locales, la mayoría de los cuales solicitaron el anonimato. InSight Crime también utilizó información proporcionada por el Ministerio del Interior de Paraguay, la Dirección General de Estadísticas, Encuestas y Censos, y prensa local.