Un reconocido narcotraficante y líder de la MS13 ha sido absuelto de los cargos de tráfico de drogas en El Salvador, destacando un contraste entre el enfoque indulgente del gobierno hacia algunos líderes de las pandillas y su duro tratamiento hacia los miembros de base.

El Quinto Tribunal de Sentencia de San Salvador absolvió a Moris Alexander Bercián Machón, alias «El Barney», según informes del 16 de junio por fuentes de noticias locales.

Fue absuelto porque «no hay evidencia de su participación en el delito de tráfico ilícito de drogas» por el cual fue acusado, según le dijeron fuentes judiciales a La Prensa Gráfica. Los cargos provienen de una incautación en 2009 de seis kilogramos de cocaína vinculada a El Barney. Se espera que la Fiscalía General apele el fallo.

El Barney lideraba un grupo criminal llamado «Normandie Locos Salvatruchos», una célula de la MS13, una de las pandillas más notorias del hemisferio. El grupo tenía su base en los departamentos costeros de Santa Ana, Ahuachapán y Sonsonate en El Salvador, aprovechando esta posición estratégica para supuestamente manejar envíos de cocaína a los Estados Unidos desde Sudamérica en los años 2000 y 2010.

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Hasta 2018, El Barney seguía siendo un miembro activo de la MS13, y había alterado su apariencia facial por medio de cirugías para evitar la detección, según documentos de inteligencia vistos por InSight Crime. Los documentos también sugieren que todavía estaba involucrado en el comercio de cocaína en 2018, organizando envíos entre Costa Rica y Guatemala con escalas en El Salvador.

Su paradero actual es incierto, mientras el juicio continua en su ausencia. Dado que enfrenta sanciones de EE.UU. y supuestamente fue responsable del tráfico de drogas hacia EE.UU., es probable que este país presione a El Salvador para extraditar a El Barney si es capturado.

El fallo a favor de El Barney se produce mientras la dura represión del presidente Nayib Bukele ha desplazado drásticamente a las pandillas de El Salvador.

En marzo de 2022, Bukele instituyó un estado de emergencia que ha visto a miles de miembros de pandillas arrestados sin juicio. A pesar de las fuertes críticas debido a las violaciones generalizadas de los derechos humanos, el estado de excepción continúa. Los salvadoreños apoyan abrumadoramente las medidas, que han traído un desplome en los homicidios del país.

Análisis de InSight Crime

Dejar que líderes pandilleros como El Barney salgan libres cuestiona el compromiso de El Salvador para luchar contra las pandillas desde la cúpula.

Varios líderes de alto perfil, quienes han orquestadores la violencia y la destrucción causada por la MS13, han evitado las represiones que han atrapado a miles de miembros de base.

El líder de la MS13, Elmer Canales Rivera, alias «Crook«, y otros tres miembros de la Ranfla, el cuerpo gobernante superior de la pandilla, fueron inexplicablemente liberados por el gobierno entre julio de 2021 y febrero de 2022, como señaló una investigación de InSight Crime. Los cuatro enfrentaban extradición a EE.UU.

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Aunque es contradictorio con la retórica anti-pandillas del gobierno, la absolución de El Barney y la liberación de otros líderes de pandillas podrían ofrecer finalmente protección política a Bukele, según Tiziano Breda, investigador de la ONG italiana Istituto Affari Internazionali, con amplia experiencia cubriendo pandillas centroamericanas.

Los líderes de pandillas extraditados a los EE.UU. podrían revelar el alcance de las negociaciones del gobierno salvadoreño con las pandillas, que se alega ocurrieron antes del inicio del estado de excepción.

«La MS13 todavía está listada entre las organizaciones criminales transnacionales por el Departamento del Tesoro, por lo que ciertamente representaría un riesgo para el gobierno extraditar a aquellos que están al tanto o que de hecho han participado activamente en estas conversaciones», dijo Breda a InSight Crime.