El heredero de lo que fue una de las principales organizaciones de tráfico de drogas de Guatemala ha sido detenido en Belice, ilustrando tanto el carácter intransigente de los grupos “transportistas” de la región como el papel, a menudo pasado por alto, de este rincón de Centroamérica en el comercio de drogas.
Adolfo Rodríguez Eribel Barrientos fue detenido en Belice por parte de agentes de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), informó Emisoras Unidas. Tras el arresto, la policía y los fiscales lanzaron una serie de redadas sobre propiedades en Guatemala vinculadas con Rodríguez, quien ahora enfrenta una orden de extradición de Estados Unidos.
Según el ministro del Interior de Guatemala, Mauricio López Bonilla, Rodríguez quedó a cargo de las operaciones de tráfico de drogas, una vez a cargo de Jorge Mario Paredes Córdoba, alias “El Gordo”, detenido en Honduras en 2008 y luego extraditado a Estados Unidos.
Análisis de InSight Crime
La organización Paredes fue una de las más poderosas de los llamados clanes de transportistas de Guatemala -grupos contratados para mover cargamentos de droga. Según el departamento de Estado de Estados Unidos, el grupo utilizó conexiones en Colombia, Panamá, Nicaragua, México y El Salvador para mover cargamentos de cocaína de varias toneladas hacia Guatemala. Una vez en el país, ésta o bien se vendía a granel a terceros distribuidores o se llevaba a Estados Unidos y se distribuía entre los contactos allí.
Paredes, sus hermanos Ever Omar y Arturo, y su mano derecha Otoniel Turcios Marroquín, alias “El Loco”, se cree que trabajaron de cerca con los Zetas de México. Sin embargo, según algunas versiones, tras la detención de Paredes y el asesinato de sus dos hermanos, los Zetas se volcaron contra Turcios, forzándolo a salir de su territorio.
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Sin embargo, una y otra vez las redes de transportistas de Guatemala han demostrado su capacidad de sobrevivir ante tales reveses; este último arresto demuestra que a pesar de las grandes pérdidas, al menos parte de la organización Paredes sigue funcionando hoy en día.
El arresto es también un recordatorio del papel que Belice juega en el tráfico de drogas. Aunque el país rara vez se menciona en las discusiones sobre el tráfico de drogas de Centroamérica, hay suficiente evidencia que indica que sus amplias costas y la debilidad institucional no han pasado desapercibidos para los traficantes de la región.
Esto ciertamente parece ser el caso de Paredes -además de la reciente detención de Rodríguez, “El Loco” Turcios, quien también fue detenido en el país en 2010.