La Familia Michoacana quemó cuatro camiones de Coca-Cola en el estado Guerrero, ubicado en el Pacífico, luego de que su compañía embotelladora se rehusara a pagar extorsiones, según señalan los informes, resaltando el poder de los grupos criminales en el estado.

El 4 de agosto, un grupo de sicarios de la organización criminal la Familia Michoacana interceptó y quemó dos camiones distribuidores de Coca-Cola y dos vehículos de ventas en la población de Arcelia, según reportes oficiales a los que tuvo acceso Proceso. El grupo presuntamente obligó a huir a los conductores de los vehículos, los cuales luego bañaron con gasolina y los quemaron con la mercancía adentro.

La compañía embotelladora Femsa dijo en una declaración que había cerrado una planta de distribución en Guerrero una semana antes tras recibir amenazas, informó la Associated Press.

Análisis de InSight Crime

En los últimos años recientes, México ha experimentado una explosión en la extorsión, afectando tanto a grandes corporaciones como a pequeños negocios. Según un informe del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC) de México, la extorsión aumentó en más del 800 por ciento entre 1997 y 2013, y 8.042 casos de extorsión fueron reportados el año pasado.

Esta alza en las extorsiones puede atribuirse tanto a la diversificación de los canales de ganancias criminales, dado que los esfuerzos de interdicción han hecho más riesgoso el tráfico de drogas, como a la fragmentación de los grupos criminales, lo que ha obligado a las facciones más pequeñas a ser autosustentables y recurrir a la economía local como una fuente de ingresos.

El hecho de que los grupos criminales estén atacando a grandes corporaciones como Coca-Cola es una inquietante señal de su confianza. Según Proceso, hay una fuerte presencia militar en el lugar en donde fueron incendiados los camiones de Coca-Cola, lo que aparentemente no impidió que la Familia Michoacana quemara los vehículos a plena luz del día.

En 2012, los Caballeros Templarios atacaron las instalaciones de una sucursal de PepsiCo en Michoacán y Guanajuato, lo cual las autoridades atribuyeron a la falta del pago de extorsiones por parte de la empresa. Otras grandes compañías –como Carso y Cemex– también han recibido amenazas, y según la Cámara de Comercio Americana de México más de un tercio de los negocios extranjeros encuestados en 2012 reportaron haber sido amenazados por extorsión.

VEA TAMBIÉN: Perfil de la Familia Michoacana

Guerrero es actualmente un lugar de conflicto entre grupos criminales rivales, lo que ha provocado un aumento en los homicidios. La Familia Michoacana, los Caballeros Templarios, el Cartel Jalisco–Nueva Generación (CJNG), y el grupo disidente de la Organización Beltrán Leyva (OBL) conocido como Los Rojos han estado envueltos en una guerra por el control del hampa del estado.

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3 respuestas a “Ataque contra Coca-Cola en México demuestra la confianza de los criminales”