El Presidente boliviano Evo Morales planea vender mate de coca a los países vecinos, en su último intento por ampliar el mercado legal de la coca –que hasta el momento no ha logrado despegar–.
Morales anunció que promovería el mate de coca en una conferencia de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) en Guayaquil, Ecuador, informó La Razón. Él dijo que había planes en marcha para comenzar a vender el mate en Ecuador y que ya había hablado con el presidente ecuatoriano Rafael Correa sobre el tema.
La Asociación Departamental de Productores de Coca de La Paz (ADEPCOCA) también inauguró una nueva planta de procesamiento de coca, según informó La Prensa, que los funcionarios dicen que puede procesar 75 toneladas de coca al año y 1.500 cajas de mate de coca cada ocho horas. La construcción de la planta costó alrededor de US$637.000, y fue subsidiada por el gobierno. Morales dijo que era necesario intensificar la producción, anticipando la demanda de los países del ALBA.
Análisis de InSight Crime
El gobierno ha buscado crear una demanda legal de coca mediante el uso de la hoja en productos como bebidas energéticas y pasta de dientes. No obstante, hay indicios de que la comercialización de los productos de coca en Bolivia no está funcionando bien. Dos plantas de procesamiento de coca, financiadas por Morales, se han cerrado debido a la falta de demanda de sus productos y un nuevo refresco de coca llamado Coca Colla, basado en la receta original de Coca Cola, tampoco pudo despegar. El viceministro de la coca dijo en mayo que el público no estaba “acostumbrado” a los productos de coca y otro oficial dijo que “la gente (…) prefiere la hamburguesa, el café.”
Queda por ver si la venta de productos de coca en el extranjero tiene más éxito. Si esto sucede, podría ayudar a Morales, él mismo un ex cocalero, a conservar el apoyo de los productores de coca del país frente a las protestas por la erradicación de cultivos ilícitos en el norte del departamento de La Paz. Los manifestantes han seguido presionando por la legalización de sus cultivos más allá de los límites actuales de cultivo legal.
La legalización de la coca en Bolivia ha causado divisiones continuas con Estados Unidos, que anunció en mayo sus planes de cerrar su oficina antidrogas en Bolivia. El Departamento de Estado de Estados Unidos sostiene que la producción potencial de cocaína en Bolivia ha aumentado pese a la reducción de hectáreas de coca cultivadas, mientras que el gobierno boliviano sigue anunciando su éxito en la lucha antidrogas.