Perú ha accedido a entregar a Peter Ferrari, acusado de tráfico internacional de oro, para que comparezca ante la justicia de Estados Unidos, pero no es claro cuándo responderá por los cargos, o si lo hará.

En enero de 2018, fiscales estadounidenses acusaron a Pedro Pérez Miranda, alias “Peter Ferrari”, de dirigir una operación de lavado de activos por valor de miles de millones de dólares alimentada por el oro ilegal. En el momento en que se divulgó el pliego de cargos, Ferrari ya había estado encerrado un año en una cárcel peruana. En enero de 2017 fue puesto en detención preventiva, señalado de haber exportado desde Perú 13 toneladas de oro ilegal, por valor de unos US$600 millones.

En julio de 2019, se extendió por seis meses más su detención en Perú. Pero la corte de apelaciones del crimen organizado en Perú halló que esa extensión fue arbitraria, y el 20 de septiembre ordenó que se le pusiera en libertad, según informó Perú 21. 

VEA TAMBIÉN: Las compañías acusadas de comprar el oro ilegal de Latinoamérica

Una semana después, el Ministerio de Justicia de Perú acogió el pedido de extradición pero señaló que primero debía resolverse el caso abierto en su contra en Perú, puntualizó Perú 21.

Análisis de InSight Crime

Desde la década del 90 se ha vinculado a Ferrari con minería de oro ilegal, narcotráfico y lavado de dinero, pero siempre se las ha arreglado para evitar ser condenado. 

Detenido por primera vez en 1999 por lavado de dinero del narco para el cartel colombiano del Norte del Valle, Ferrari fue absuelto de esas acusaciones en 2002.  

En 2013, las autoridades incautaron unos 500 kilos de oro sospechoso a nombre de seis firmas exportadoras en el puerto de Callao. Una de dichas firmas era Rivero Minerales, de propiedad de un sobrino de Ferrari. El abogado de Ferrari en esa época señaló que solo financiaba la empresa, pero los documentos de la fiscalía lo describían como “financiador y negociador principal de oro ilegal, que exporta usando empresas fachada registradas en Lima”, informó InSight Crime

En 2014, los 300 kilos de oro pertenecientes a Rivero Minerales fueron devueltos después de un fallo de un juez de distrito, quien posteriormente fue retirado de su cargo y detenido por cargos de corrupción.

VEA TAMBIÉN: Las autoridades sospechan complicidad masiva de exportadores peruanos en minería ilegal de oro

En 2015, la policía confiscó una casa de Ferrari en la playa, valorada en US$1 millón, más 100 kilos de oro ilegal hallados en un baúl de propiedad de su primo 

Dos años después lo arrestaron, junto con otras cinco personas, acusado de estar detrás de la exportación de 13 toneladas de oro ilegal valorado en más de US$600 millones. Desde entonces se encontraba en detención preventiva hasta que la corte de apelaciones ordenó su liberación en septiembre pasado. 

Ahora que el Ministerio de Justicia de Perú aprobó el pedido de extradición de Estados Unidos a nombre suyo, parecería que Ferrari finalmente responderá ante la justicia. Pero no se sabe cuándo o siquiera si habrá extradición, dado que la extradición solo podrá hacerse efectiva una vez se completen todos los procesos judiciales en su contra en Perú.