Las autoridades de Argentina incautaron un enorme cargamento de 80 toneladas de químicos precursores usados para la elaboración de cocaína a unos pocos metros de la frontera boliviana, lo que pone de relieve la importancia del austral como proveedor en el negocio regional de la droga ilícita.
Miembros de la Gendarmería Nacional de Argentina decomisaron recientemente 77 toneladas de bicarbonato de sodio en una casa que servía como bodega encubierta en la ciudad fronteriza de Salvador Mazza, al norte de Argentina, según un reportaje de La Nación. Posteriormente las autoridades encontraron siete toneladas más en un depósito cercano ubicado a unos 30 metros de la frontera boliviana.
El área en la que se descubrieron los precursores es pobre en su mayor parte, y muchos lugareños dependen del contrabando de productos en la frontera para asegurar su subsistencia, según La Nación.
Un agente de la Gendarmería dijo que la redada “fue un golpe importante” para el narcotráfico en la zona, porque es raro que las autoridades decomisen una cantidad tan grande de químicos precursores.
También fueron arrestados dos ciudadanos sirios, sospechosos según las autoridades de ser proveedores importantes de precursores para laboratorios de cocaína en Bolivia, informó La Nación.
Análisis de InSight Crime
La enorme redada ilustra el rol clave que juega Argentina en el abastecimiento de los ingredientes esenciales para la producción de cocaína. Las autoridades, por ejemplo, incautaron más de 65 toneladas de bicarbonato de sodio en la misma parte, al norte del país en 2013. Una vez se usan los químicos para transformar las hojas de coca en cocaína en Bolivia, algunas veces la droga vuelve por la frontera a Argentina para abastecer a los cocainómanos de ese país. Parte de la cocaína se despacha hacia Europa, donde los precios y los márgenes de ganancia son mucho más altos.
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Además de la cocaína, Argentina es un proveedor importante de químicos precursores usados para la elaboración de drogas sintéticas, como metanfetaminas. El país se considera fuente importante de precursores para los grupos narcotraficantes mexicanos, incluyendo el Cartel de Sinaloa. Las capturas de drogas sintéticas a gran escala indican que la producción también está aumentando para seguirle el paso a la cada vez mayor popularidad de estas drogas entre los aficionados a ir de fiesta hasta la madrugada.
La corrupción en el gobierno también se cita con frecuencia como favorecedores del tráfico de ambas clases de químicos precursores. En el caso más reciente, un juez que en 2010 había expedido un requerimiento legal sobre los sirios fue arrestado este año como sospechoso de haber recibido sobornos de presuntos narcotraficantes. Así mismo, varios altos funcionarios de la administración de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) han sido vinculados con traficantes de efedrina, un precursor para la producción de metanfetaminas.